2018jun03 | Así fueron los últimos días de Marcela Basteri, mamá de Luis Miguel | Revista Quien (México)



Título: Así fueron los últimos días de Marcela Basteri, mamá de Luis Miguel
AutorMario Villagrán 
Fuente: Revista Quien
Lugar y fecha: México, 3 junio 2018
Linkhttps://www.quien.com/espectaculos/2018/06/03/asi-fueron-los-ultimos-dias-de-marcela-basteri-mama-de-luis-miguel




ESPECTÁCULOS
Así fueron los últimos días de Marcela Basteri, mamá de Luis Miguel
Este es el recuento de los últimos días de la vida de Marcela Basteri, madre de Luis Miguel, antes de que se perdiera su rastro.
Mario Villagrán - Domingo, 3 de junio de 2018


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PIE Luis Miguel, Marcela Basteri


Apenas la ve entrar por la puerta del camerino del legendario Luna Park, en Argentina, y salta de su asiento. Su traje color beige lo hace ver mucho más adulto, pero basta con ver como su madre entra por la puerta, entre camarógrafos y asistentes, para que el niño recupere toda la inocencia. "Es mamá. Ahí está mamá", balbucea. Ella, vestida de blanco y con los ojos ya llenos de lágrimas, corre hacia él y cubre su cuello con los dos brazos. Lo aprieta. Es su hijo y no lo va a soltar. Lo besa. Le pega sus lágrimas a la mejilla. Él, sonríe de nuevo, nervioso. Todos aplauden a su alrededor y la escena queda en la cámara.



Segundos después, el reportero se acerca y termina con el vals: "Señora, ¿es difícil ser la madre de Luis Miguel?". "No, para mí no", responde Marcela y vuelve a abrazar a su hijo que ahora cambia la sonrisa por esa actitud propia de adulto que le sirvió como recurso tantos años y que tan buenos resultados le está dando entre los bonaerenses.

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PIE Marcela Basteri con su hijo Alejandro.

El calendario dice que es el 16 de marzo de 1985 y Marcela llevaba cerca de cuatro meses sin ver a su hijo, desde noviembre de 1984, cuando terminó de filmar su segunda película Fiebre de amor. Una larga promoción de cuatro semanas por Chile y Argentina, la grabación de un disco en italiano (Collezione Privata), y el arranque de su gira 'Palabra de honor' habían comenzado la separación, pero fue febrero de 1985 (el mes más importante de su carrera, hasta entonces), el mes que puso la verdadera distancia y el primero en escuchar la pregunta: ¿Dónde está la mamá de Luis Miguel?

No estaba el 15 de febrero de 1985, cuando dominó al público de Viña del Mar con una peculiar versión de "Let it Be", puesta en escena junto a la cantante de Jazz Connie Field y su esposo el director de orquesta y legendario jazzista Horacio Icasto, con la que se llevó a casa la Antorcha de plata.

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PIE Luisito Rey y Marcela Basteri tuvieron tres hijos: Luis Miguel, Alejandro y Sergio.

Pero cuando más se le esperaba, el 26 de febrero de 1985, tampoco se le vio. Era el día en que su hijo levantaría, en el Shrine Auditorium (Los Angeles) su primer Grammy al ganar en la categoría Mejor interpretación mexicano-americana (al lado de Sheena Easton) gracias a "Me gustas tal como eres", una canción del compositor (y años después, su mentor) Juan Carlos Calderón con la que se firmó la sentencia de internacionalización del niño Gallego Basteri.

¿Es difícil ser la mamá de Luis Miguel?"… La pregunta nos regresa al Luna Park, Luis Miguel sube a su madre al escenario, la sienta y, abrazándola, le canta los versos que su padre le había compuesto muchos años atrás: "Tus palabras son caricias a mi corazón, Marcela. Mi nublado cielo lo alumbraste con tu sol, Marcela". Es la última vez que se abrazaran así, ante miles. Es la última vez que le cantará a "Marcela".

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PIE  Al menos eso es lo que piensa el orgulloso papá pues fuentes cercanas dicen que Alex ha comentado que le recuerda mucho a su mamá, Marcela Basteri.


NADA VALE NADA SI NO ESTÁS, MARCELA...

Cuenta Adua Basteri que ese día por la mañana no hacía tanto frío, pero que todos disimulaban tenerlo para al menos tener un tema de conversación mientras llegaban al Aeropuerto Internacional Galilei de Pisa. El trayecto de 50 minutos desde Carrara se estaba volviendo eterno con Sergio llorando en el asiento de atrás y Marcela nerviosa, sujetando con ambos brazos la maleta que llevaba, como si en ello se le fuera la vida.

Adua asegura en sus distintos relatos y entrevistas, que aquel 18 de agosto de 1986, tenía un presentimiento de no dejar ir a su sobrina a España, pero era tanta la determinación de Marcela que poco pudo hacer. "Ella nos decía que Luis Rey le pedía firmar unos papeles sobre propiedades y permisos y nunca más la volvimos a ver", declaró hace un par de años la hermana de Sergio, el abuelo militar de Luis Miguel.

Marcela llevaba, junto con su hijo Sergio, de dos años, cerca de siete meses viviendo en la región de Toscana antes de viajar a España donde vivían Luis Rey sus otros dos hijos, ligados a la carrera de Luis Miguel. Durante ese periodo, y de acuerdo a sus familiares, ella buscó recuperarse del fracaso que significó no poder impedir que Luis Miguel se profesionalizara como cantante.

Lo que comenzó en 1982 como un juego con el disco Un Sol y que continúo en el mismo año con Directo al corazón (en el que aparece la canción "Marcela"), terminó por salirse de su control en 1983 con la grabación en España del disco Decídete, en el que la apuesta económica por Luis Miguel ya era grande y anunciaba lo que vendría a poner el clavo a la familia Gallego-Basteri.

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PIE Luis Miguel, un amigo de la familia, Luis Rey, Alejandro, Marcela Basteri y Sergio durante la navidad de 1984 en México.

A partir de ahí, los meses de Luis Miguel y Luisito Rey por Europa, con giras por Italia, España, Dinamarca, Holanda y Alemania, así como sus paradas por Chile (que incluyeron otro éxito en Viña del Mar 1986) y Argentina, empujaron a la decisión final de Marcela de dejar a sus dos hijos y regresar a su país natal hasta aquel 18 de agosto, donde voló a España y su nombre dejó de pronunciarse hasta que teorías tan inverosímiles como contradictorias (que van desde su asesinato en una fiesta de narcos en Chihuahua hasta su aparición en un manicomio en Italia, pasando por señalamientos de prostitución o una vida tranquila en Canarias) buscaron darle respuesta al enigma de El Sol.

Hoy, ante la producción de una seria autorizada de su vida y ante las confesiones que Luis Miguel realiza para ello a Mark Burnett, presidente de Televisión y Contenido Digital para MGM, la pregunta: ¿Dónde está la madre de Luis Miguel? tiene una oportunidad para acabar, con una sola respuesta, con teorías, tías, músicos, periodistas y amigos que han olvidado que, como Marcela respondió: "No, no es difícil ser la madre de Luis Miguel".

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ENGLISH

This was the last days of Marcela Basteri, mother of Luis Miguel
This is the recount of the last days of the life of Marcela Basteri, mother of Luis Miguel, before her trace was lost.


As soon as he sees her enter through the door of the dressing room of the legendary Luna Park, in Argentina, he jumps from his seat. His beige suit makes him look much more adult, but it is enough to see how his mother enters the door, between cameramen and assistants, so that the child recovers all innocence. "It's mom, there's mom," she babbles. She, dressed in white and with her eyes already full of tears, runs towards him and covers her neck with both arms. It squeezes. It's his son and he's not going to let go. Kiss it. Shes his tears to the cheek. He smiles again, nervous. Everyone applauds around and the scene is in the camera.
Seconds later, the reporter approaches and ends with the waltz: "Madam, is it difficult to be the mother of Luis Miguel?". "No, not for me," Marcela replies and embraces her son who now changes his smile because of that adult attitude that served him as a resource for so many years and what good results he is giving among the people of Buenos Aires.
The calendar says it's March 16, 1985 and Marcela had not seen her son for nearly four months, since November 1984, when he finished filming his second film Fever of Love. A long four-week promotion by Chile and Argentina, the recording of an album in Italian (Collezione Privata), and the start of their 'Palabra de honor' tour had begun the separation, but it was February 1985 (the most important month of his career, until then), the month that put the true distance and the first to hear the question: Where is Luis Miguel's mother?
It was not on February 15, 1985, when he dominated the audience of Viña del Mar with a peculiar version of "Let it Be", staged with Jazz singer Connie Field and her husband the legendary jazz conductor Horacio Horacio Icasto, with whom he took home the Silver Torch.
But when he was most expected, on February 26, 1985, he was not seen either. It was the day his son would raise his first Grammy at the Shrine Auditorium (Los Angeles) by winning the Best Mexican-American performance (next to Sheena Easton) thanks to "I like you just the way you are", a song from composer (and years later, his mentor) Juan Carlos Calderón with whom the internationalization sentence of the child Gallego Basteri was signed.
Is it difficult to be Luis Miguel's mother? "... The question returns us to Luna Park, Luis Miguel goes up to his mother on stage, feels her and, embracing her, sings the verses that his father had composed him many years ago:" Your words are caresses to my heart, Marcela. My cloudy sky you lit it with your sun, Marcela. "It is the last time that they embraced like this, before thousands, it is the last time they will sing to" Marcela ".


NOTHING IS NOTHING IF YOU ARE NOT, MARCELA ...

Adua Basteri that day in the morning was not so cold, but everyone hid to have it to at least have a topic of conversation while arriving at the Galilei International Airport in Pisa. The 50 minute journey from Carrara was becoming eternal with Sergio crying in the back seat and nervous Marcela, holding with both arms the suitcase she was carrying, as if it were her life.
Adua says in his various stories and interviews that on August 18, 1986, he had a feeling of not letting his niece go to Spain, but Marcela's determination was so great that she could do little. "She told us that Luis Rey asked her to sign some papers about properties and permits and we never saw her again," Sergio's sister, Luis Miguel's military grandfather, said a couple of years ago.
Marcela had, along with her son Sergio, two years, about seven months living in the region of Tuscany before traveling to Spain where Luis Rey lived his other two children, linked to the career of Luis Miguel. During that period, and according to her relatives, she sought to recover from the failure that meant not being able to prevent Luis Miguel from becoming a professional singer.
What began in 1982 as a game with the album Un Sol and that continued in the same year with Directo al corazón (in which the song "Marcela" appears), ended up getting out of control in 1983 with the recording in Spain of disco Decide, in which the economic bet for Luis Miguel was already great and announced what would come to put the nail to the Gallego-Basteri family.
From there, the months of Luis Miguel and Luisito Rey for Europe, with tours of Italy, Spain, Denmark, Holland and Germany, as well as their stops in Chile (which included another success in Viña del Mar 1986) and Argentina, pushed to the final decision of Marcela to leave her two children and return to her native country until that August 18, where she flew to Spain and her name stopped being pronounced until such unlikely as contradictory theories (ranging from her murder in a party of narcos in Chihuahua until his appearance in an asylum in Italy, passing through prostitution signs or a quiet life in the Canary Islands) sought to answer the enigma of El Sol.
Today, before the production of a serious authoritative of his life and before the confessions that Luis Miguel makes for it to Mark Burnett, president of Television and Digital Content for MGM, the question: Where is the mother of Luis Miguel? she has an opportunity to finish, with a single answer, with theories, aunts, musicians, journalists and friends who have forgotten that, as Marcela responded: "No, it is not difficult to be the mother of Luis Miguel".



FRANÇAIS

Ce fut les derniers jours de Marcela Basteri, mère de Luis Miguel
C'est le recomptage des derniers jours de la vie de Marcela Basteri, mère de Luis Miguel, avant que sa trace ne soit perdue.


Dès qu'il la voit entrer par la porte du vestiaire du légendaire Luna Park, en Argentine, il saute de son siège. Son costume beige le fait paraître beaucoup plus adulte, mais il suffit de voir comment sa mère entre la porte, entre cameramen et assistants, pour que l'enfant retrouve toute son innocence. "C'est maman, il y a maman", elle babille. Elle, vêtue de blanc et les yeux déjà pleins de larmes, court vers lui et lui couvre le cou des deux bras. Il serre. C'est son fils et il ne va pas le lâcher. Il l'embrasse Shes ses larmes à la joue. Il sourit à nouveau, nerveux. Tout le monde applaudit et la scène est dans la caméra.
Quelques secondes plus tard, le journaliste s'approche et se termine avec la valse: "Madame, est-ce difficile d'être la mère de Luis Miguel?". «Non, pas pour moi», répond Marcela et embrasse son fils qui change de sourire à cause de cette attitude d'adulte qui lui a servi de ressource pendant tant d'années et des bons résultats qu'il donne aux habitants de Buenos Aires.
Le calendrier dit que c'est le 16 mars 1985 et que Marcela n'a pas vu son fils depuis près de quatre mois, depuis novembre 1984, date à laquelle il a terminé le tournage de son deuxième film, Fever of Love. Une longue promotion de quatre semaines par le Chili et l'Argentine, l'enregistrement d'un album en italien (Collezione Privata) et le début de leur tournée "Palabra de l'honneur" ont commencé la séparation, mais c'était février 1985 (le mois le plus important de sa carrière, jusque-là), le mois qui a mis la vraie distance et le premier à entendre la question: Où est la mère de Luis Miguel?
Ce n'est pas le 15 février 1985, quand il a dominé le public de Viña del Mar avec une version particulière de "Let It Be", avec la chanteuse de jazz Connie Field et son mari, le légendaire chef de jazz Horacio Horacio Icasto, avec qui il a remporté la Torche d'argent.
Mais quand il était le plus attendu, le 26 février 1985, il n'était pas vu non plus. Il était le jour où son fils souleverait son premier Grammy au Shrine Auditorium (Los Angeles) en remportant la meilleure performance mexicaine-américaine (à côté de Sheena Easton) grâce à "Je t'aime juste comme tu es", une chanson de compositeur (et des années plus tard, son mentor) Juan Carlos Calderón avec qui a été signé la phrase d'internationalisation de l'enfant Gallego Basteri.
Est-ce difficile d'être la mère de Luis Miguel? "... La question nous ramène à Luna Park, Luis Miguel monte sur sa mère sur scène, la sent et, l'embrassant, chante les vers que son père lui avait composés il ya plusieurs années:" Tes mots sont des caresses pour mon cœur, Marcela. Mon ciel nuageux tu l'as éclairé de ton soleil, Marcela. "C'est la dernière fois qu'ils s'embrassent comme ça, devant des milliers, c'est la dernière fois qu'ils vont chanter" Marcela ".


RIEN N'EST RIEN QUE SI VOUS N'ÊTES PAS, MARCELA ...

Adua Basteri ce jour-là n'était pas si froid, mais tout le monde s'est caché pour avoir au moins un sujet de conversation en arrivant à l'aéroport international Galilei de Pise. Le voyage de 50 minutes de Carrara devenait éternel avec Sergio pleurant sur le siège arrière et Marcela nerveuse, tenant à deux bras la valise qu'elle portait, comme si c'était sa vie.
Adua dit dans ses différentes histoires et interviews que le 18 août 1986, il avait le sentiment de ne pas laisser sa nièce aller en Espagne, mais la détermination de Marcela était si grande qu'elle pouvait faire peu. "Elle nous a dit que Luis Rey lui avait demandé de signer des documents sur les propriétés et les permis et nous ne l'avons jamais revu", a déclaré la sœur de Sergio, le grand-père militaire de Luis Miguel, il y a quelques années.
Marcela avait, avec son fils Sergio, deux ans, environ sept mois vivant dans la région de Toscane avant de voyager en Espagne où Luis Rey a vécu ses deux autres enfants, liés à la carrière de Luis Miguel. Pendant cette période, et selon ses proches, elle a cherché à se remettre de l'échec qui signifiait ne pas être en mesure d'empêcher Luis Miguel de devenir un chanteur professionnel.
Ce qui a commencé en 1982 comme un jeu avec l'album Un Sol et je continue dans la même année avec Droit au coeur (où la chanson « Marcela » apparaît), enfin hors de contrôle en 1983 avec l'enregistrement l'Espagne disco Décidez, dans lequel le pari économique pour Luis Miguel était déjà grand et a annoncé ce qui viendrait à mettre le clou à la famille Gallego-Basteri.
A partir de là, les mois de Luis Miguel et Luisito Rey en Europe, avec des visites de l'Italie, l'Espagne, le Danemark, la Hollande et l'Allemagne, ainsi que des arrêts au Chili (qui comprenait un autre coup à Vina del Mar 1986) et de l'Argentine, ont poussé la décision finale Marcela laissant ses deux enfants et les retourner dans son pays natal jusqu'à ce 18 Août où il a volé en Espagne et son nom a cessé de régner jusqu'à ce que les théories aussi improbable que contradictoires (allant de assassiner lors d'une fête de narcos à Chihuahua jusqu'à son apparition dans un asile en Italie, en passant par des signes de prostitution ou une vie tranquille dans les îles Canaries) a cherché à répondre à l'énigme d'El Sol.
Aujourd'hui, avec la production d'un grave autorisé de sa vie et aux confessions Luis Miguel effectue pour à Mark Burnett, président de la télévision et de contenu numérique pour MGM, la question: Où est la mère de Luis Miguel? Il a une chance de finir avec une réponse unique, des théories, des tantes, des musiciens, des journalistes et des amis qui ont oublié que, Marcela a répondu: « Non, ce n'est pas difficile d'être la mère de Luis Miguel ».



ITALIANO

Questo è stato l'ultimo giorno di Marcela Basteri, madre di Luis Miguel
Questo è il racconto degli ultimi giorni della vita di Marcela Basteri, madre di Luis Miguel, prima che la sua traccia fosse persa.


Non appena la vede entrare dalla porta del camerino del leggendario Luna Park, in Argentina, salta dal suo posto. Il suo vestito beige lo fa sembrare molto più adulto, ma è sufficiente vedere come sua madre entra nella porta, tra i cameramen e gli assistenti, in modo che il bambino recuperi tutta l'innocenza. "È mamma, c'è mamma," balbetta lei. Lei, vestita di bianco e con gli occhi già pieni di lacrime, corre verso di lui e le copre il collo con entrambe le braccia. Si stringe. È suo figlio e non lascerà andare. Lo bacia Fa le sue lacrime sulla guancia. Sorride di nuovo, nervoso. Tutti applaudono e la scena è nella fotocamera.
Qualche secondo dopo, il giornalista si avvicina e finisce con il valzer: "Signora, è difficile essere la madre di Luis Miguel?". "No, non per me", risponde Marcela e di nuovo abbracciare suo figlio, che ora sta cambiando sorriso che proprio adulto atteggiamento che ha servito come una risorsa così tanti anni e tanto successo sta dando tra Buenos Aires.
Il calendario dice che è il 16 marzo 1985 e Marcela non ha visto suo figlio per quasi quattro mesi, dal novembre 1984, quando ha finito le riprese del suo secondo film Fever of Love. Una lunga la promozione di quattro settimane in Cile e Argentina, registrare un album in lingua italiana (Collezione Privata), e l'inizio del suo tour 'parola d'onore' aveva cominciato la separazione, ma era febbraio 1985 (il mese più importante la sua carriera, fino ad allora), il mese che ha messo la vera distanza e il primo a sentire la domanda: dov'è la madre di Luis Miguel?
Non era il 15 Febbraio 1985, quando ha dominato il pubblico Vina del Mar con una versione particolare di "Let it Be", messo in scena da cantante jazz Connie Field e il marito, direttore d'orchestra e il leggendario musicista jazz Horacio Icasto, con il quale ha portato a casa la torcia d'argento.
Ma quando si aspettava di più, il 26 febbraio 1985, non fu nemmeno visto. E 'stato il giorno in cui suo figlio avrebbe sollevato, allo Shrine Auditorium (Los Angeles) il suo primo Grammy vincere per la migliore interpretazione messicana-americana (accanto al Sheena Easton) grazie a "Mi piaci come sei", una canzone compositore (e anni dopo, il suo mentore) Juan Carlos Calderón con il quale fu firmata la sentenza di internazionalizzazione del figlio Gallego Basteri.
E 'difficile essere la madre di Luis Miguel "... La domanda ci riporta al Luna Park, Luis Miguel si alza a sua madre sul palco, sentirlo e, tenendola, canta i versi che il padre gli aveva fatto molti anni fa:"? Le tue parole sono carezze al mio cuore, Marcela. Il mio cielo nuvoloso l'hai acceso con il tuo sole, Marcela. "È l'ultima volta che si abbracciano così, prima di migliaia, è l'ultima volta che cantano per" Marcela ".


NULLA NON È NULLA SE NON SEI, MARCELA...

Adua Basteri quel giorno non era così fredda, ma tutti si nascosero per avere almeno un argomento di conversazione mentre arrivavano all'aeroporto internazionale Galilei di Pisa. Il viaggio di 50 minuti da Carrara stava diventando eterno con Sergio che piangeva sul sedile posteriore e nervosa Marcela, tenendo con entrambe le braccia la valigia che stava trasportando, come se fosse stata la sua vita.
Adua dice nelle sue varie storie e interviste che il 18 agosto 1986 aveva la sensazione di non lasciare andare sua nipote in Spagna, ma la determinazione di Marcela era così grande che lei poteva fare ben poco. "Ci ha detto che Luis Rey le ha chiesto di firmare alcuni documenti su proprietà e permessi e non l'abbiamo mai più vista", ha detto la sorella di Sergio, nonno militare di Luis Miguel, un paio di anni fa.
Marcela indossava, insieme al figlio Sergio, due anni, circa sette mesi che vivono nella regione Toscana prima di partire per la Spagna dove vivevano Luis Rey gli altri suoi due figli, legati alla carriera di Luis Miguel. Durante quel periodo, e secondo i suoi parenti, cercò di riprendersi dall'insuccesso che significava non poter impedire a Luis Miguel di diventare un cantante professionista.
Quello che è iniziato nel 1982 come un gioco con l'album Un Sol e che è proseguito nello stesso anno con Directo al corazón (nel quale compare la canzone "Marcela"), ha finito per perdere il controllo nel 1983 con la registrazione in Spagna di disco Decide, in cui la scommessa economica per Luis Miguel era già grande e annunciava cosa sarebbe venuto a mettere l'unghia alla famiglia Gallego-Basteri.
Da lì, i mesi di Luis Miguel e Luisito Rey in Europa, con tour in Italia, Spagna, Danimarca, Olanda e Germania, così come arresti in Cile (che comprendeva un altro colpo a Vina del Mar 1986) e Argentina, hanno spinto la decisione finale Marcela lasciando i suoi due figli e tornare al suo paese natale fino a quel 18 agosto dove è volato in Spagna e il suo nome ha cessato di governare fino teorie improbabile quanto contraddittorio (che vanno dall'omicidio ad una festa narcos a Chihuahua fino alla sua apparizione in un manicomio in Italia, attraverso le accuse di prostituzione o di una vita tranquilla nelle isole Canarie) hanno cercato di dare risposta all'enigma di El Sol.
Oggi, con la produzione di un grave autorizzato della sua vita e le confessioni Luis Miguel esegue per la sua Mark Burnett, presidente della televisione e contenuti digitali per la MGM, la domanda: Dove è la madre di Luis Miguel? Si ha la possibilità di finire con una singola risposta, le teorie, le zie, musicisti, giornalisti e amici che hanno dimenticato che, come Marcela ha risposto: "No, non è difficile essere la madre di Luis Miguel".



PORTUGUÊS

Este foi os últimos dias de Marcela Basteri, mãe de Luis Miguel
Esta é a recontagem dos últimos dias da vida de Marcela Basteri, mãe de Luis Miguel, antes que seu rastro fosse perdido.


Assim que a vê entrar pela porta do camarim do lendário Luna Park, na Argentina, ele pula de seu assento. Seu terno bege faz com que ele pareça muito mais adulto, mas é o suficiente para ver como sua mãe entra na porta, entre cinegrafistas e assistentes, para que a criança recupere toda a inocência. "É mãe, tem mãe", ela balbucia. Ela, vestida de branco e com os olhos já cheios de lágrimas, corre em sua direção e cobre o pescoço com os dois braços. Ele aperta. É seu filho e ele não vai deixar ir. Ele beija ele Shes suas lágrimas na bochecha. Ele sorri novamente, nervoso. Todos aplaudem e a cena está na câmera.
Segundos depois, o repórter se aproxima e termina com a valsa: "Senhora, é difícil ser mãe de Luis Miguel?". "Não, não é para mim", ela responde Marcela e novamente abraçar o seu filho que agora está mudando sorriso que próprio adulto atitude que serviu como um recurso tantos anos e tanto sucesso está dando entre Buenos Aires.
O calendário diz que é 16 de março de 1985 e Marcela não tinha visto seu filho há quase quatro meses, desde novembro de 1984, quando ele terminou de filmar seu segundo filme Febre do Amor. Uma longa promoção de quatro semanas no Chile e na Argentina, gravando um álbum em italiano (Collezione Privata), eo início de sua turnê 'palavra de honra' tinha começado a separação, mas era fevereiro de 1985 (o mês mais importante sua carreira, até então), o mês que colocou a verdadeira distância e o primeiro a ouvir a pergunta: Onde está a mãe de Luis Miguel?
Não era o 15 de fevereiro de 1985, quando ele dominou o público Vina del Mar com uma versão peculiar de "Let it Be", encenada pela cantora de jazz Connie Field e seu marido, maestro e músico de jazz lendário Horacio Icasto, com quem ele levou para casa a tocha de prata.
Mas quando ele era mais esperado, em 26 de fevereiro de 1985, ele também não foi visto. Foi o dia em que seu filho iria aumentar, no Shrine Auditorium (Los Angeles) seu primeiro Grammy ganhar de Melhor Performance Mexicano-Americana (ao lado de Sheena Easton), graças ao "eu gosto de você como você é," uma canção compositor (e anos depois, seu mentor) Juan Carlos Calderón com quem foi assinada a sentença de internacionalização da criança Gallego Basteri.
É difícil ser a mãe de Luis Miguel "... A questão nos remete ao Luna Park, Luis Miguel sobe para sua mãe no palco, senti-lo e, segurando-a, canta os versos que seu pai o tinha feito há muitos anos:"? Suas palavras são carícias para o meu coração, Marcela. Meu céu nublado você acendeu com o seu sol, Marcela. "É a última vez que eles se abraçam assim, diante de milhares, é a última vez que eles cantam para" Marcela ".


NADA É NADA SE VOCÊ NÃO É, MARCELA ...

Adua Basteri naquele dia de manhã não estava tão frio, mas todos se esconderam para ter pelo menos um tema de conversa enquanto chegavam ao Aeroporto Internacional Galilei, em Pisa. A viagem de 50 minutos de Carrara estava ficando eterna com Sergio chorando no banco de trás e nervosa Marcela, segurando com os dois braços a mala que estava carregando, como se fosse sua vida.
Adua diz em suas várias histórias e entrevistas que em 18 de agosto de 1986, ele tinha a sensação de não deixar sua sobrinha ir para a Espanha, mas a determinação de Marcela era tão grande que ela pouco podia fazer. "Ela nos disse que Luis Rey pediu a ela que assinasse alguns documentos sobre propriedades e licenças e nós nunca mais a vimos", disse a irmã de Sergio, avô militar de Luis Miguel, há alguns anos.
Marcela tinha, junto com seu filho Sergio, dois anos, cerca de sete meses vivendo na região da Toscana antes de viajar para a Espanha, onde Luis Rey viveu seus outros dois filhos, ligados à carreira de Luis Miguel. Durante esse período, e de acordo com seus parentes, ela procurou se recuperar do fracasso que significava não ser capaz de impedir Luis Miguel de se tornar um cantor profissional.
O que começou em 1982 como um jogo com o álbum Un Sol e que continuou no mesmo ano com Directo al corazón (em que a música "Marcela" aparece), acabou ficando fora de controle em 1983 com a gravação na Espanha de discoteca Decide, na qual a aposta econômica para Luis Miguel já era grande e anunciava o que viria a colocar a unha na família Gallego-Basteri.
A partir daí, os meses de Luis Miguel e Luisito Rey para a Europa, com visitas à Itália, Espanha, Dinamarca, Holanda e Alemanha, bem como suas paradas no Chile (que incluíram outro sucesso em Viña del Mar, 1986) e Argentina à decisão final de Marcela de deixar seus dois filhos e retornar ao seu país natal até 18 de agosto, para onde voou para a Espanha e seu nome deixou de ser pronunciado até teorias tão improváveis ​​como contraditórias (desde seu assassinato em uma festa). de narcos em Chihuahua até sua aparição em um asilo na Itália, passando por sinais de prostituição ou uma vida tranquila nas Ilhas Canárias, procurou responder ao enigma de El Sol.
Hoje, antes da produção de uma séria autoridade de sua vida e ante as confissões que Luis Miguel faz a Mark Burnett, presidente de Televisão e Conteúdo Digital da MGM, a pergunta: Onde está a mãe de Luis Miguel? ela tem a oportunidade de terminar, com uma única resposta, com teorias, tias, músicos, jornalistas e amigos que esqueceram que, como Marcela respondeu: "Não, não é difícil ser mãe de Luis Miguel".

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